24 de abril de 2016

¿Por qué suenan nuestros dedos al crujirlos?

    En este blog, además de curiosidades y noticias sobre el mundo científico, también disfruto mucho desmontando mitos o explicando afirmaciones que oímos desde que somos pequeños y que damos por ciertas sin ni siquiera dudarlo, porque son nuestros padres o abuelos quien nos las dicen. Traeré  varios ejemplos, pero hoy nos vamos a centrar en el que veis en el título. ¿Es malo crujirse los dedos? ¿Podemos acabar con artritis como nos decían de pequeños? Aquí tenéis lo que ocurre y por qué suenan los dedos al crujirlos.






¿Qué provoca ese ruido?


     En primer lugar, hay que entender cómo son y de qué están compuestas nuestras articulaciones. Los huesos que coinciden en una articulación, no están directamente en contacto, sino que hay otros varios componentes para protegerles y facilitar el movimiento. Así, en el extremo de cada uno de los huesos, hay cartílago,  un material sólido y elástico que resiste bien tanto la compresión como la tracción. Y, para lubricar y suavizar el movimiento, en la cavidad que queda entre ambos huesos, se encuentra un líquido viscoso conocido como líquido sinovial. 

    Se trata, precisamente, de este líquido. Es quien influye en el famoso “crujido”, pues dentro de este hay aire disuelto. Cuando te crujes los dedos, la articulación se separa, ampliando el espacio dentro de la cápsula articular, lo que provoca burbujas microscópicas deseosas de ocupar más espacio.  Esas burbujas se unen para formar unas más grandes que se estallan cuando entra más fluido en el espacio abierto. Lo que nosotros escuchamos, es el estallar de esas burbujas. 

No podemos repetir el crujido al momento después de haberlo hecho, ya que se necesita un período de unos 15 o 20 minutos  para que el gas se disuelva y sea absorbido de nuevo en el líquido sinovial.


¿Es cierto el mito de que puede ocasionar artritis?


     Se ha oído y hay algunos estudios que aseguran que puede llegar a causar artritis, inestabilidad en la articulación y pérdida de la fuerza y función de la mano por desgaste del cartílago. Aunque ninguno de estos estudios muestra evidencias suficientes o relación directa entre ese hábito y los problemas articulares muy posteriores.

     El estudio que más ha sonado en la comunidad científica sobre la relación entre artritis y el crujir de dedos, fue el ganador del Ig Nobel de 2009 (premios científicos a investigaciones poco convencionales), en la que un doctor se estuvo crujiendo los dedos de únicamente su mano izquierda (la derecha nunca) durante 60 años. Tras someterse a diversas pruebas ambas manos, se vio que no había indicio alguno  de artritis en ninguna de las dos.


      Por tanto, el mayor problema de crujirse los dedos, es el que afecta a la persona observadora, y no ejecutora, ya que hay muchos (grupo en el cual me incluyo) a quienes nos irrita o nos da grima escuchar a otra persona crujirse los dedos.  De hecho, para quien lo hace, llega a ser incluso placentero. De ahí que entre un cuarto y la mitad de las personas, se crujen los dedos de forma habitual.




2 comentarios:

  1. muy buena información!! gracias por el post!!

    ResponderEliminar
  2. Vaya faena. Soy un crujidor de huesos desde hace muchos años y cuando estaba intentando dejar esta manía, vas y publicas este artículo.

    ResponderEliminar

¡Compártelo!